Neumáticos para el invierno ¿¿En España??

Hasta el 22 de diciembre no comienza de manera oficial el invierno en el hemisferio norte, pero en otoño ya nos asalta la duda sobre si los neumáticos que montamos en el coche son los apropiados. 

Existen varios tipos de neumáticos, pero según el clima donde vivamos y el tipo de uso que le demos al coche pueden resultar apropiados unos u otros.

La duda principal en épocas de lluvia, hielo y nieve…, ¿cuál es la mejor opción?



Cuando caen las temperaturas, los neumáticos varían su comportamiento. El caucho y el resto de los componentes que se utilizan para la fabricación de las bandas de rodadura (y toda la capa externa) son sensibles a las variaciones térmicas. En invierno se endurecen y pierden capacidad de agarre. 

Por eso existen neumáticos que se elaboran con recetas especiales para aguantar el tipo cuando cae el termómetro y empeoran las condiciones.


Estamos hablando de los neumáticos de invierno y los all season. Unos sirven para utilizar en climas extremadamente fríos y húmedos y los otros son aptos para todo el año como su nombre indica. 


En España no es obligatorio el uso de neumáticos de invierno como sí ocurre en otros países de nuestro entorno. Si vives en Sevilla (por ejemplo) no te afecta o si subes a la sierra una vez al año, basta con llevar unas cadenas en el maletero. Pero si conduces en zonas de montaña o de la meseta con inviernos fríos te puede empezar a interesar.


El neumático de invierno 

Es el que usan en países nórdicos, cambiándolos por unos normales cuando llega la primavera, y así cada año, ya que los de invierno se degradan rápido en condiciones de suelo seco. Son más eficaces a temperaturas muy bajas, pero requieren cambiarse y sitio para guardarlos. En España no es una opción, salvo que vivas en una estación de esquí.

Un neumático all season 

Tienen un rango de acción mucho más amplio que los neumáticos de invierno, son aptos para cualquier condición climática y tienen un buen rendimiento en circunstancias más o menos complicadas. Es la opción más apropiada.

El criterio que puedes usar para saber si los necesitas es que la temperatura media de la zona sea inferior a 7ºC en los meses de invierno. Por debajo de esa temperatura funcionan mejor que un neumático convencional.



Con los de invierno o con los all season, no es necesario el uso de cadenas. Siempre que veas en su flanco el pictograma de una montaña de tres picos con un copo de nieve en su interior

El inconveniente que tienen es que son más caros y que se desgastan con mayor rapidez que un neumático de seco.

Y si eres el gestor de la flota…

El gestor de la flota que contrata el mantenimiento con el renting o con la empresa de neumáticos, puede plantearse su uso. Entrará en un debate entre el coste y la necesidad real que tienen los conductores que lo solicitan, que no son pocos.

Para decidirlo hay que hacerse dos preguntas:

¿Es la temperatura media de la zona por la que conduce el trabajador habitualmente inferior a 7ºC en invierno?

Si la respuesta es sí, entra el debate entre seguridad y costes, que no inversión. Entonces viene la segunda pregunta:

¿Está dispuesta la empresa a asumir un precio mayor en neumáticos para aportar seguridad a algunos de sus trabajadores?

Para responderte a esta segunda pregunta llama a Prevensis y te ayudaremos a tomar la mejor decisión para la seguridad y rentabilidad de su empresa